Vinos sudafricanos
Sudáfrica, cuyos vinos logran combinar las tradiciones europeas con el sabor del Nuevo Mundo, se encuentra hoy entre los países productores de vino más interesantes. El cultivo de vides en esta región se remonta a 1659, gracias al trabajo de la Compañía Holandesa de las Indias Orientales, que planta viñedos en el área donde Ciudad del Cabo se elevará posteriormente. La producción de vino comenzó a despegar alrededor de 1680 con la llegada de inmigrantes franceses, italianos y alemanes, hasta el desarrollo extraordinario a finales del siglo siguiente.
Las áreas más adecuadas, entre las que se destaca la región de Stellenbosch, se encuentran en territorios que disfrutan de un clima óptimo donde la ventilación constante, dada por la presencia de los dos océanos, otorga a los vinos características únicas y reconocibles al primer sorbo. Entre las variedades más comunes encontramos vides como Sémillon, Chenin Banc, Chardonnay, Sauvignon Blanc para vinos blancos, o incluso Cabernet Sauvignon, Pinotage, una variedad exclusiva de Sudáfrica, Shiraz para tintos.