Larmandier-Bernier
Desde el siglo XIX, la familia Larmandier cuida las viñas de los viñedos Premier Cru y Grand Cru de la Côte des Blancs, contribuyendo a la reputación de los champagnes que allí se producen. Esta región consigue producir champagnes caracterizados por una elegante mineralidad debida al componente calcáreo de sus suelos, característica que sólo se puede encontrar en otros lugares cerca de la famosa montaña de Reims. Hablamos de los viñedos Grand Cru de Cramant, Chouilly, Avize y Oger, y del viñedo Premier Cru Vertus.
En 1971, Philippe Larmandier se casó con Elisabeth Bernier, entonces propietaria de viñedos en Vertus, uniendo fuerzas y dando origen al champán Larmandier-Bernier. Desde 1999, la maison se ha fijado el objetivo de crear un champán capaz de expresar fielmente su terruño de origen, impulsada por la creencia de que un gran champán nace ante todo en el viñedo. Por este motivo, la maison decidió adherirse a los principios de la viticultura biodinámica y optó siempre por seguir un proceso de elaboración del vino lo más natural posible. Claros ejemplos de ello son la fermentación por levaduras autóctonas y la maduración prolongada en madera en la que el vino base tiene la posibilidad de oxigenarse y expresarse plenamente. Los champagnes resultantes son únicos: maduros, minerales, puros y muy íntimos con su terruño de origen.