Dolceriva
En lugar de agua, el sol alisa la orilla. Pero la orilla de la que estamos hablando es algo diferente a la orilla marina o fluvial y en una zona donde reina la pendiente, la importancia de la radiación solar, tan beneficiosa para la vid, no podía pasar desapercibida. Dolceriva quiere recordar en el nombre la progresión gradual de las 'riberas' que en dialecto veneciano simbolizan "una pequeña parcela de tierra o un viñedo dispuesto en la ladera". Pendientes suaves para la elaboración de uvas Glera, que maduran en perfectas condiciones y retienen cargas aromáticas intensas y perturbadoras para vinos espumosos aptos para nuestra 'dolce vita'. Dolceriva es todo esto, una continua referencia a la espectacular configuración paisajística que cada día alimenta esta cepa, que vibra aromas y sabores, que transmite el sentido de pertenencia a una tierra y sus costumbres. Pero, al mismo tiempo, es un himno a la vida, a la 'dolce vita', una síntesis de la alegría que solo un espumoso polivalente podría contener. Compañero ideal para cenas refinadas en las que se debe reservar una atención especial a la forma o amigo especial para enamorar la diversión en nombre de la digresión y la alegría.